Liga 1

Decían que no trabajaba y así es cómo Gorosito cerró bocas con su labor en Alianza

El estratega argentino cayó como anillo al dedo dentro de los planes blanquiazules

Por Renato Perez

Alianza Lima - Néstor Gorosito (Foto: X)
Alianza Lima - Néstor Gorosito (Foto: X)

Al inicio de 2025, cuando Néstor Gorosito asumió la dirección técnica de Alianza Lima, las expectativas no eran las mejores. Pocos creían en su capacidad de hacer historia en la Copa Libertadores. Incluso, algunos periodistas se burlaron de él, como fue el caso del argentino Flavio Azzaro, quien lo criticó duramente, diciendo que a Gorosito “le gustaba tomar sol” y que su “momento favorito era el mercado de pases”.

Estas palabras no solo pusieron en duda la preparación del técnico, sino que también alimentaron una imagen de falta de compromiso y profesionalismo. Sin embargo, lo que ocurrió a continuación fue una verdadera demostración de capacidad, liderazgo y trabajo en equipo al haber hecho historia en la presente edición de la Copa Libertadores de América.

El camino imparable hacia la fase de grupos

Alianza Lima sorprendió a todos en las fases previas de la Copa Libertadores, desmintiendo todas las críticas que rodeaban a su director técnico. En la primera ronda, el equipo eliminó a Nacional de Paraguay con un rendimiento sobresaliente. La intensidad y la organización en la cancha fueron claras señales del trabajo realizado por Néstor Gorosito, quien logró sacar lo mejor de cada jugador. Este triunfo no solo significó el pase a la siguiente fase, sino también el inicio de un camino lleno de confianza y optimismo.

El gran triunfo ante Boca Juniors

En la segunda fase, el reto se incrementó: Alianza Lima se enfrentó a uno de los gigantes del fútbol sudamericano, Boca Juniors. A pesar de las dudas previas, Gorosito y su equipo desplegaron un fútbol de altísimo nivel, con una defensa sólida, un mediocampo dominante y una delantera efectiva. El resultado fue una victoria histórica que, además de eliminar a Boca, dejó claro que el equipo de Alianza estaba preparado para competir en los más altos niveles del fútbol continental. Los jugadores confiaron plenamente en el trabajo de su técnico y la química entre ambos fue evidente.

Consolidación en la tercera fase

Finalmente, en la tercera fase, Alianza Lima se enfrentó a Deportes Iquique, un rival que, si bien no contaba con el nombre de Boca Juniors, no dejaba de ser un obstáculo complicado. Pero, bajo la dirección de Gorosito, el equipo mantuvo su nivel de juego y pasó con contundencia a la fase de grupos. Esta clasificación representó mucho más que un simple avance en el torneo: fue una declaración de intenciones de que Alianza Lima, con Gorosito al mando, podía competir con los mejores de América.

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