No más experimentos en este nuevo Perú de Ibáñez, el aspecto TOP que se podría explotar ante Bolivia

El ciclo de Jorge Fossati al frente de la Selección Peruana estuvo marcado por la constante incertidumbre. A lo largo de 2024, los hinchas y jugadores vivieron con la sensación de que no había un rumbo claro, especialmente en el aspecto táctico. Fossati probó varios esquemas, incluidos el 3-5-2, que no lograron dar la solidez ni la identidad que Perú necesita en su camino hacia el Mundial 2026. Con la llegada de Óscar Ibáñez, todo esto parece haber cambiado. El nuevo técnico ha apostado por un sistema 4-3-3 más equilibrado, que busca consolidar una alineación titular fija y dar confianza a los jugadores clave. En ese esquema, el mediocampo conformado por Renato Tapia, André Carrillo y Sergio Peña se perfila como uno de los puntos fuertes de la Bicolor en el partido de hoy nte Bolivia.

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El mediocampo de Ibáñez: confianza y equilibrio para ser un equipo TOP

Una de las grandes fortalezas del nuevo Perú de Óscar Ibáñez es la confianza que el DT ha depositado en un grupo consolidado, particularmente en la zona del mediocampo. En el esquema 4-3-3, la presencia de Renato Tapia, André Carrillo y Sergio Peña en el centro del campo será fundamental para dominar el partido ante Bolivia. Cada uno aporta características únicas que, combinadas, ofrecen un equilibrio ideal para la selección.

• Renato Tapia: El “Capitán del Futuro” se encargará de la contención y el equilibrio defensivo. Tapia es el motor del equipo, siempre dispuesto a recuperar balones y distribuir con precisión. Su visión de juego y capacidad de recuperación serán cruciales para cortar los avances bolivianos y darle fluidez a las jugadas de ataque.
• André Carrillo: Aunque históricamente ha jugado como extremo, bajo el esquema de Óscar Ibáñez, Carrillo puede desempeñarse de manera más centralizada, aportando su gran capacidad de pase y llegada al área. Su velocidad y habilidad para driblar se combinan bien con la necesidad de profundizar por el centro, dándole a Perú una vía adicional de ataque.
• Sergio Peña: El mediocampista de salida será el encargado de conectar las líneas, dando creatividad al equipo. Peña tiene la capacidad de asociarse con los delanteros y distribuir el balón con visión, algo que se echó en falta en el ciclo anterior. Su rol será crucial para darle dinamismo al ataque, creando opciones y aprovechando los espacios que deje la defensa rival.

El contraste con el ciclo de Fossati: orden y confianza ahora con Ibáñez

A diferencia de Jorge Fossati, quien durante 2024 no logró definir un sistema fijo y probó múltiples jugadores y formaciones, Óscar Ibáñez ha optado por darle continuidad a un esquema claro y predecible. El sistema 4-3-3 se adapta perfectamente a las características de los jugadores de Perú, especialmente en el mediocampo, donde la posesión y el control del juego se vuelven fundamentales. El hecho de que los tres mediocampistas mencionados hoy sean titulares refleja la intención del DT de consolidar un bloque de confianza, con futbolistas que ya tienen experiencia en Eliminatorias y saben lo que se requiere en este tipo de competiciones.

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El 4-3-3: la formación ideal para Perú

El 4-3-3 de Óscar Ibáñez podría ser la clave para explotar al máximo el talento de jugadores como Renato Tapia, André Carrillo y Sergio Peña. El sistema permite mayor flexibilidad, con Carrillo y Peña pudiendo sumarse al ataque de manera directa, mientras Tapia se mantiene firme en el centro para recuperar balones. Además, este esquema otorga a Perú un mayor control del juego en el mediocampo, algo vital para enfrentar a selecciones como Bolivia, que, aunque suelen ser combativas, no siempre logran mantener la posesión del balón.