Todos hablan de Sonne como la sorpresa vs Uruguay, pero mira quién será el verdadero 'tapadito' de Fossati

Mientras todos los focos se centran en Oliver Sonne y su sorpresiva inclusión en la alineación titular de la Selección Peruana para enfrentar a Uruguay, hay otro jugador que, silenciosamente, está llamado a ser fundamental en el desempeño del equipo: Jesús Castillo.

El volante central, que ha ganado terreno en las últimas convocatorias, se ha convertido en una pieza clave en el esquema táctico de Jorge Fossati. Su capacidad para recuperar balones, distribuir el juego y cubrir grandes espacios del terreno de juego lo convierten en un jugador esencial para el equilibrio del equipo.

Un perfil bajo, pero un rendimiento alto

A diferencia de Oliver Sonne, que ha generado gran expectativa por su llegada al fútbol peruano y su proyección a futuro, Castillo ha ido consolidándose de manera gradual en la selección. Su juego, más discreto pero no por ello menos efectivo, ha pasado desapercibido para muchos aficionados. Sin embargo, su importancia para el equipo es innegable.

Castillo aporta al equipo:

• Equilibrio: Su presencia en el mediocampo le da equilibrio al equipo, permitiendo que los jugadores más creativos tengan mayor libertad para atacar.
• Recuperación: Es un jugador incansable en la recuperación de balones, lo que ayuda a proteger a la defensa y a iniciar las jugadas ofensivas.
• Distribución: A pesar de su rol defensivo, Castillo tiene una buena visión de juego y es capaz de distribuir el balón con precisión.

La importancia del volante central

El rol del volante central es fundamental en cualquier equipo de fútbol. Es el jugador que conecta la defensa con el ataque y que tiene la responsabilidad de mantener el equilibrio del equipo. En el caso de la Selección Peruana, Jesús Castillo cumple a la perfección con esta función.

Su presencia en el equipo le da a Perú una mayor solidez defensiva y permite al equipo jugar con mayor tranquilidad. Además, su capacidad para recuperar balones y distribuir el juego es esencial para generar ocasiones de gol.

Con apenas 24 años, Jesús Castillo tiene un futuro prometedor por delante. Su crecimiento en los últimos años ha sido notable y se espera que siga mejorando con el paso del tiempo. Si continúa trabajando de esta manera, pronto se convertirá en uno de los referentes del fútbol peruano.

En conclusión, si bien Oliver Sonne ha acaparado todos los titulares, es importante destacar la importancia de Jesús Castillo en la Selección Peruana. El volante central, con su juego sólido y eficaz, es una pieza clave en el esquema de Jorge Fossati y su contribución al equipo es invaluable.